domingo, 22 de marzo de 2020

Una manualidad





Hoy os traemos como hacer botellas de la calma. Son simplemente botellas llena de líquido espesado y cositas variadas a ser posible brillantes.



 Las botellas de la calma son una estrategia Montesorri para ayudarnos a calmarnos y una metáfora de lo que pasa en nuestro cerebro cuando estamos nerviosos: todos los pensamientos andan por ahí rebotando y mediante la respiración podemos hacer que "bajen al fondo". Son sencillas de usar: si estamos nerviosos agitamos la botella y miramos como todo se revoluciona dentro mientras respiramos hasta que se calme la botella y con ella nosotros.

Debido a las circustancias que nos está tocando vivir quizás no tengamos en casa todo lo que necesitamos, así que tocará echar mano de la imaginación.


¿ Qué se necesita?

1 botella transparente con tapa que se cierre bien
Cosas variadas brillantes o no
Agua
Glicerina o pegamento escolar transparente o gelatina o aceite de bebé (todo esto se usa para ralentizar el agua, si no se tiene pues no se hecha nada)
Algo para colorear el agua (tinta, colorante, pimentón... si no tienes nada puedes sacrificar un rotulador y sacar la almoadilla llena de tinta que tienen dentro, mojarla en el agua hasta que la de color)


¿ Cómo se hace?

Echa pegamento o glicerina o sirope de maíz o aceite de bebé ... vamos lo que tengas en la botella que vayas a usar. Y aquí toca experimentar... Un poco de estas cosas y luego agua ... Ve probando hasta que lo que tengas en la botella sea líquido... pero no tanto (me parezco a mi abuela cuando me decía que echara harina: "lo que coja la masa"). Me explico, muy poco líquido hará que no se muevan los "tropezones" que echemos, muy líquida hará que todo baje muy rápido y necesitaremos agitarla muchas veces hasta calmarnos.

Mete dentro cositas: animalitos pequeños de plástico, trocitos de envoltorio de galletas brillante, canicas, purpurina... tampoco muchas. En este caso, es también mejor probar: empieza por pocas, cierra la botella, agita, mira que pasa... echa más si es necesario.

Y ¡ya está! botella hecha. Podéis hacer varias con diferentes espesuras y cantidad de cosas y observar qué pasa (convirtiendo la manualidad en una clase de ciencias a lo Montesorri)

Prueba a mirarla usando una linterna o la mesa de luz. ¡ Quedan preciosas!!

Si quieres algunas ideas mira esta página: PINCHA AQUÍ que es de donde hemos sacado las fotos además. Ahí las hacen secas también, pero entonces son botellas sensoriales, pero también nos valen para entretenernos un rato y estimular nuestra mente.



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